Recibimos el año con una sonrisa (otros con una gran resaca), los propósitos para los meses que vienen en los que intentaremos cambiar el mundo y, como es miércoles, ¡un nuevo post de interiorismo!
En esta ocasión hablaremos de una tienda que me encanta. Se trata del local comercial de Timberland en Westfield London, diseñado por el estudio Checkland Kindleysides.
Una de las partes fundamentales del brief de Timberland para su nueva tienda en Westfield London, fue el reto de traer a la vida el árbol de su emblemático logo y mostrar sus valores ambientales en acción.
Este desafío se vio trasladado al diseño de la tienda mediante el entramado de ramas de madera reciclada que se extienden a los largo de la fachada lateral, la entrada principal y los soportes del techo con forma de árbol que forman la arquitectura del local, que envuelven la tienda con el logo de la marca de una forma fantástica.
La simbología de la fachada crea una declaración de marca tal, que la señalización y los rótulo de acero actúan simplemente como un respaldo o ayuda para indicar que se trata de Timberland.
La estructura crea interesantes vistas de la tienda y la forma y extensión inusuales de los escaparates permiten que la gran mayoría de zapatos se expongan en un marco sencillo, mientras que en la fachada principal, en la parte delantera de la tienda, las composiciones se han colocado contrapuestas a muebles y accesorios reciclados.
Las puertas de 3,50 m., que también han sido fabricadas con tablones reciclados, se abren para flanquear la entrada y dar la bienvenida a los visitantes de la tienda. Ya en el interior, en la parte delantera de la tienda, se encuentra una serie de expositores rematados con un material tipo pizarra que exhiben los últimos modelos de las líneas de calzado y ropa de la marca.
Siguiendo la política medioambiental de la marca, más de 85% de los materiales utilizados en su construcción han sido recuperados después de tener otra función en su vida anterior.
La tienda utiliza una variedad de elementos a diferentes alturas para exponer el producto a nivel de suelo, como mesas de exhibición formadas por pilas de madera con tapas intercambiables, que se pueden mezclar y combinar cambiando sutilmente la presentación de los productos.
La de la izquierda, la pared "shoe-lath", se compone de zapateros de madera vintage, que contrastan con el acero laminado del panel posterior y permite la comercialización visual "relajada" y versátil de su calzado, ropa y accesorios.
Al igual que en otras tiendas, se ha hecho referencia a la historia local con fotografías históricas y gráficos que adornan las paredes alrededor de los vestuarios. Rinden homenaje al estadio olímpico de 1908 que se encontraba anteriormente en ese lugar. Además, las paredes de los vestuarios más espaciosos están cubiertas de gráficos a gran escala, que invitan a los clientes a probar la ropa rodeados de árboles o montañas cubiertas de nieve.
Por último, al atraer a los visitantes de nuevo hacia la parte delantera de la tienda, se encuentra la caja, con su crudo aspecto artesanal. La recepción ha sido construida cuidadosamente con capas de madera y cuero y se encuentra enmarcada en el contexto de las puertas recicladas.
"Esta tienda ofrece un ejemplo perfecto de lo que representamos como marca. Refleja nuestra herencia de la artesanía, nuestra relación con la naturaleza, así como nuestros valores ambientales en acción. El frente de la tienda y el diseño interior del 'Market Place' representa un hito icónico de Timberland en el mundo del retail".
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