El café es una de mis bebidas favoritas, esa que no puedo dejar de lado ni un sólo día de mi vida. Para desayunar, a media mañana, a media tarde, sola o acompañada, caliente o con hielo, siempre hay una buena excusa para pasar por una cafetería cerca de casa o el trabajo para disfrutar de su riquísimo sabor.
El café une a las personas. Nos ayuda a interactuar entre nosotros. Ya sea en una cafetería, la universidad y la oficina, el café suele ser el compañero ideal para esos momentos de relax en los que nos reunimos a desconectar (o cotillear) con los amigos y compañeros de trabajo.
Teniendo esta idea en mente, la última campaña de Nescafé en Alemania ha decidido mostrarnos esos momentos especiales a través de "Instant Connections" (Conexiones Instantáneas) una acción de márketing en la que se colocó dos máquinas expendedoras que regala café en medio de la calle.
Bajo la premisa de que las personas no deberían esperar solas, aburridas o molestas en un semáforo en rojo, las máquinas expendedoras se colocaron en dos postes justo antes de un cruce peatonal en Berlín, con el objetivo de "puentear" la distancia entre los peatones a ambos lados de la calle e insentivarlos a interactuar.
¿Cómo? El ejercicio es bastante simple. Ambas máquinas cuentan con una vídeo cámara cada una, de forma que las personas puedan verse claramente a través de la distancia. El quid de la cuestión es que las máquinas no sirven el café a menos que ambas personas presionen el botón de la máquina al mismo tiempo, por lo que tienen que comunicarse y sincronizarse a través de señas.
¿Qué opinan? ¿No sería genial encontrarse con una de estas máquinas en el camino al trabajo cada mañana?
Yo tampoco puedo vivir sin café, Alexandra. Cómo me gustaría que pusieran una de esas maquinitas en algún semáforo de Madrid. La idea es genial.
ResponderEliminarMuy buen fin de semana, guapa, besos
Ohhhh, eso sería genial, Erika! Lo llegan a poner cerca de mi trabajo y me vuelvo loca :)
EliminarNo se si es la edad, pero ahora no sólo no puedo vivir sin mis cafés diarios, tampoco puedo dejar mi té relajante! :P
¡Besos!